La ley Scout


 

La misión del Movimiento Scout es contribuir a la educación de los jóvenes para que participen en la construcción de un mundo mejor, donde las personas se desarrollen plenamente y jueguen un papel constructivo en la sociedad.

 

Ley Scout

  • El Scout es digno de confianza
  • El Scout es leal
  • El Scout sirve sin esperar recompensa
  • El Scout comparte con todos
  • El Scout es alegre y cordial
  • El Scout protege la vida y la naturaleza
  • El Scout es responsable y nada hace a medias
  • El Scout es optimista
  • El Scout cuida las cosas y valora el trabajo
  • El Scout es coherente en su pensamiento, palabra y acción.
Información obtenida desde Manual Scout aprobado en 2016

 

 

Promesa

La Promesa es un compromiso voluntario hecho ante sí mismo y los demás, para cumplir la Ley Scout. Sus palabras y sus conceptos son sencillos y expresan el compromiso tal como lo diría naturalmente un joven.

 

Texto Promesa

Por mi honor prometo
hacer cuanto de mí dependa para
buscar a Dios,
amar a mi familia,
ayudar a los demás,
servir a mi país,
trabajar por la paz
y vivir la Ley Scout.

Información obtenida desde Manual Scout aprobado en 2016

 

 

¿Qué aspiramos a ser?

Una persona íntegra y libre,
limpia de pensamiento y recta de corazón,
de voluntad fuerte, responsable de sí misma,
que ha optado por un proyecto personal de vida
y que, fiel a la palabra dada, es lo que dice ser.

Una persona servidora de los demás,
solidaria con su comunidad,
defensora de los derechos de los otros,
comprometida con la democracia, integrada al desarrollo,
amante de la justicia, promotora de la paz,
que valora el trabajo humano,
que construye su familia en el amor,
que reconoce su dignidad y la del sexo complementario
y que, alegre y afectuosa, comparte con todos.

Una persona creativa
que se esfuerza por dejar el mundo mejor de como lo encontró,
comprometida con la integridad de la naturaleza,
interesada por aprender continuamente,
en búsqueda de pistas aún no exploradas,
que hace bien su trabajo
y que, libre del afán de poseer,
es independiente ante las cosas.

Una persona espiritual,
con un sentido trascendente para su vida,
que camina al encuentro de Dios,
que vive alegremente su fe y la integra a su conducta
y que, abierta al diálogo y a la comprensión,
respeta las opciones religiosas de los demás.

 

Información obtenida desde Manual Scout aprobado en 2016